LECTURA POLÍTICA

Noé Mondragón Norato

Congreso local: Plan C muy limitado

Otra vez el Congreso local fue objeto de cuestionamientos severos a su desempeño. Sobre todo, en lo referente a la aprobación de la reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial del estado que cancelaría la pensión vitalicia a los magistrados. Una iniciativa presentada curiosamente por el PRD, un partido político a cuyos militantes en bancarrota electoral, el senador Toro acaba de invitar para que se sumen a las filas del Morena. Hay en consecuencia, un filo político innegable. Como si la alianza que tendiera en la elección pasada el PRD con el PRI y el PAN en el plano local, sirviera de referente para que muchos de los damnificados perredistas abandonen en definitiva ese barco tras decretarse la pérdida de su registro en el plano nacional. Es cuestión de pulsar la coyuntura.

REFORMA AL VAPOR. – Sin analizar a detalle los impactos que podría generar, los diputados locales aprobaron a ciegas y parcialmente, una iniciativa que quisieron vender como “un gran logro legislativo”. Los indicadores apuntan hacia todo lo contrario. Se lee así: 1.- Concluida la elección presidencial del pasado 2 de junio, el PRD presentó ante el pleno esa propuesta. La sospecha aparece de manera natural. ¿Por qué no lo hizo cuando las campañas electorales estaban en su apogeo y dicha medida pudo ayudar a la alianza PRI-PRD-PAN a obtener más votos? El plan de reforma al Poder Judicial local ni siquiera se cacareó antes de las elecciones. Tal parece que en el propio Morena decidieron que el PRD presentara dicha iniciativa en la 63 legislatura, tras la aparatosa derrota electoral sufrida. Es una forma de guiñarle el ojo a los militantes de ese partido caído en desgracia política. Porque sin los votos del Morena, sencillamente no pasaría. Y, además, los integrantes de la actual legislatura local de mayoría morenista se congracian por adelantado con la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum. Es a la vez, una forma de mandarle señales claras en el sentido de que “el Plan C” de la 4T está iniciando con pie firme en Guerrero. Pero no midieron los costos. 2.- “El Poder Judicial en vez de impartir justicia para el pueblo (…) se ha convertido en un poder al servicio de una minoría, de la delincuencia organizada y de la delincuencia de cuello blanco. No olviden eso”, dijo en una de sus mañaneras recientes el presidente AMLO. La idea central del Plan C está relacionada justamente con la reforma al Poder Judicial federal que pondera una elección abierta por parte de la ciudadanía para designar magistrados y jueces. Pero a diferencia de esta, en Guerrero la mano de esa reforma no alcanza a plenitud a jueces y magistrados. Porque está manca de nacimiento. De esta forma, a todos ellos se les quita la pensión vitalicia a cambio de una liquidación de retiro. Pero aplica a partir de los próximos magistrados y jueces que lleguen a laborar. No a los que ya se fueron y a los que están en funciones. Para el erario el costo no disminuirá y todas esas infames prerrogativas seguirán pagándose con los impuestos de todos los guerrerenses. El beneficio en realidad es nimio. Con el agravante de que el Poder Judicial en Guerrero está infestado de corrupción. ¿De qué sirve cercenar pensiones vitalicias cuando se elude por otro lado, atacar de fondo el manejo arbitrario y torcido de la Ley? 3.- Como es obvio, la medida generó resistencias de quienes se niegan a perder sus privilegios. Saltó en ese sentido la magistrada del Poder Judicial, Indalecia Pacheco León, quien evaluó la medida como “inconsistente, sin sustento jurídico y transgresora del derecho humano en cuestión laboral”. Y demandó primero, reformar la Constitución política del país, luego la local y al final la Ley Orgánica del Poder Judicial. El punto es que la primera reforma federal en ese sentido mandataría en automático a la local. Se entiende que, por elemental sentido común, la reforma a la Constitución federal no precisaría de más reformas locales en virtud de que ese documento nos rige a todos los mexicanos. Y el Congreso local tienen toda la libertad de seguir el procedimiento, tal y como ocurre con las cámaras de diputados y senadores, sin la injerencia del Poder Judicial. Pero ningún poder público está dispuesto a perder sus privilegios. El asunto es que ya no gobierna el PRI ni el PAN que permitieron y alentaron todos esos excesos. Y toda aquella medida que le quite privilegios a los “iluminados” del derecho, es bienvenida. El punto es que el Congreso local se quedó muy corto en cercenar privilegios al Poder Judicial local. La Jucopo del Morena y de Citlali Calixto Jiménez, otra vez volvieron a fracasar en su intención de dar seguimiento al Plan C. Pero son los costos políticos de la improvisación, el desconocimiento de la Ley y la ausencia de olfato político.

HOJEADAS DE PÁGINAS…Como un acto de absoluta descortesía y desdén se leyó la ausencia del rector de la UAGro Javier Saldaña, en el evento convocado por el sindicato académico (STAUAG) en un salón de fiestas de la capital, para conmemorar el Día del Maestro en la región Centro. Además de los pocos regalos que se rifaron todos fueron de muy raquítico valor. Y no hubo grupo musical para amenizar el baile, pero si una ronca bocina que distorsionaba voces y música. Los docentes de la UAGro se quejaron de la soberbia del poder que marea constantemente a Saldaña al grado de hacerlo perder piso y percibir a la Universidad como su imperio y a los docentes como sus siervos. Porque al desechar la convivencia con los maestros universitarios, mostró también su desprecio hacia ellos. Pero también mandó señales de que el dirigente del STAUAG, Ofelio Martínez Llanes ha caído de su gracia como un integrante más de su vasta red de lacayos.