Zona Cero

Maltrato en la Procuraduría de la Mujer

Roberto Santos

Si hay un lugar donde un grupo de trabajadoras y trabajadores han intentado convertir su lugar de trabajo en su feudo, este es en la Procuraduría de la defensa de la Mujer.

En dicho lugar existe un grupo de empleadas y empleados, supernumerarios y de base, que hasta el momento han carecido de toda ética para atender a las mujeres que a esta noble institución llegan a pedir ayuda, a quienes no solo no las ayudan sino que las re victimizan, las maltratan y algunas deben entregar dinero durante el proceso de atención.

Es decir, hay señalamientos de que comenten actos de corrupción, atienden sin perspectiva de género, carecen de empatía, y mucho menos son sororas.

Si lo anterior no fuera suficiente para conseguir una definición, hay que agregar que tampoco conocen la vergüenza, pues les gusta victimizarse y esperemos que no tengan en mente una vez más cerrar el edificio “Vicente Guerrero” y vuelvan a acudir a lloriquearle a la Secretaria de la Mujer para que los apapache y despida a la Procuradora en turno, como sucedió con la anterior titular.

 La reacción de estos trabajadores es porque la Procuradora le exige que cumplan con su labor y la atención a las usuarias sea pronta, con calidad y calidez.

Más de una ocasión han logrado que quiten a Procuradora cuando Violeta Pino les da la razón sin antes investigar el fondo del asunto, y aunque hay quejas en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, ante la Semujer, y la misma Procuraduría de la Defensa de la Mujer, la secretaria termina por ignorarlas.

La semana pasada se publicaron varias denuncias de usuarias que han sido maltratadas y re victimizadas.

Es el momento en que la titular de Semujer se ponga a trabajar en serio para que muevan a este grupo de ociosos, irresponsables, corruptos y mafiosos trabajadores y trabajadoras que, al pervertir su conducta, impiden que las mujeres usuarias sean tratadas con respeto, empatía, solidariamente y sororamente.

Ojalá que las demandas de las usuarias muevan las conciencias de quienes pueden mover a este grupo que tanto daño le hacen a esta institución y afectan a quienes sí trabajan con ética y responsabilidad.