CONSTRUYENDO COMUNIDAD TAXCO

PERIODISMO DE INVESTIGACIÓN

EN IGUALA ADEMÁS DE POBRES, RACISTAS Y CLASISTAS.

EL RETO DE ERICK CATALÁN

Por: Roberto Castillejo.

Taxco, Guerrero, julio 30 del 2024. Al revisar los últimos informes de pobreza y rezago social, me doy cuenta que algunos municipios de la Región Norte del Estado de Guerrero, no han logrado abatir los índices negativos al respecto. A pesar de la inversión social que hace el Gobierno Federal a través de la Secretaría del Bienestar, el malestar sigue persistiendo en diferentes ámbitos.

La pandemia provocada por el COVID-19 (2020-2023), motivo a que en varios países elaboraran nuevas directrices en la forma de estructurar las relaciones sociales, y la relación entre el estado y el ciudadano. En México por ejemplo se le denominó la “Nueva Normalidad” que para mi gusto bien podría titularse “La nueva realidad”.

La ciudad de Iguala es uno de los municipios que enfrenta una nueva realidad. En los últimos años, ha experimentado complejidades que han sido muy difíciles de superar. Desde el año dos mil catorce con la desaparición de 43 jóvenes normalistas y con las protestas de exigencia de justicia que vinieron a la par, la economía del pueblo igualteco se vio afectada considerablemente.

Los dos gobiernos posteriores al de José Luis Abarca, Esteban Albarrán (2015-2018) y Antonio Jaimes (2018-2021), no se preocuparon en lo mínimo en elaborar un diagnóstico que permitiera detectar el malestar de la sociedad y desarrollar políticas públicas enfocadas a restablecer los valores que rigen y dan cohesión al grupo social.

En la actualidad y gracias a los avances académicos, la pobreza se mide con un enfoque “multidimensional” esto significa, que no nada más se mide el ingreso de las familias, sino que además se mide el rezago educativo, acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, acceso a la alimentación, calidad y espacios de la vivienda, acceso a servicios básicos en la vivienda, grado de cohesión social.

Lo anterior es con base en la Ley General de Desarrollo Social. Cabe hacer mención que dicha medición le permite a México el reconocimiento ante instancias internacionales.

En Iguala de acuerdo a los indicadores de pobreza multidimensional, registra una población de 86,943 mil personas pobres traduciéndose en 54.5% del total de la  población. En pobreza moderada existen 53,183 mil personas, lo que significa el 33.3% de la población, mientras que el 21,1% de los igualtecos viven en pobreza extrema, o sea 33,761 (21.1%) habitantes lo padecen. Mientras que 44,727 mil personas son vulnerables por carencia social, y por otra parte existen 8,076 mil personas vulnerables por ingresos. Únicamente 19,884 mil personas de un total de 160,327 mil habitantes no son pobres y no vulnerables.

El número de personas que enfrenta las carencias sociales en la ciudad de Iguala como ya lo hemos comentado son 44,727 lo que se traduce en:  27,731 personas en rezago educativo; 63,812 personas tienen acceso a los servicios de salud; 103,886 personas tienen acceso a la seguridad social; únicamente 31,935 personas tienen acceso a la calidad y espacios de la vivienda; 67,681 personas tienen acceso a los servicios básicos en la vivienda y lastimosamente el 50,037 personas tienen acceso a la alimentación nutritiva y de calidad. (https://www.gob.mx/bienestar/documentos/informe-anual-sobre-la-situacion-de-pobreza-y-rezago-social)   

Después de haber analizado el informe de Bienestar, y de escuchar a la próxima presidenta de México decir que dará “continuidad” y que seguirá trabajando con los programas sociales me queda claro, que si estamos en un gran rezago. 

¿NARRATIVA DE ODIO?

Ahora bien, Después de ver la actuación de candidatos en las pasadas elecciones, especialmente la de Erick Catalán, un pobre político empírico, no creo que vengan grandes cambios para el municipio. El haber

posicionado una narrativa de odio, racista y clasista, confirmo que estamos muy lejos de desarraigar estos males sociales en la comunidad igualteca. Esto es una muestra de lo que se puede llegar hacer por la ambición y la obsesión del poder político, por ello algunos políticos terminan enfermos por el poder.

No quiero minimizar el hecho que el triunfo de Erick Catalán, estuvo impregnado de formas clasistas. Y si un grupo de gente acepto dicha política sucia, legitima dicha actuación. En consecuencia, se legitimó la desigualdad, el clasismo y el racismo.

Por muy elaboradas que estén las políticas del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED), para implementar la perspectiva cultural, la perspectiva de igualdad sustantiva, enfoque diferenciado, perspectiva interseccional  y perspectiva de género, no habrá un cambio. Y menos con las conductas que presentan estos políticos, que lejos de contribuir a la cohesión social, la dividen.      

Llevando a cabo un análisis comparativo, podemos observar que con el arquitecto David Gama Pérez,   actual alcalde del municipio de Iguala, se logró aligerar los datos estadísticos, sin embargo no es suficiente, se requiere de políticas de gran impacto y no creo que Erick Catalán sea la solución.

DICHO SEA DE PASO: ¿Por qué creo que Erick Catalán no será la solución? Simplemente porque en la presente administración tiene tres regidores y no propusieron cambios sustanciales cuando tuvieron la oportunidad en el espacio político, mucho menos ahora que el Partido Verde Ecologista será gobierno. Vamos de mal en peor.

Nota: Fuentes de información estadística: CONAPO, INEGI, DOF, CONEVAL, SECRETARIA DE BIENESTAR.