* La Entrevista…

Roberto Antonio Márquez Añorve.

«Como maestro jubilado me siento bien, no tengo limitaciones, sé que llegará el momento en que tenga que retirarme ahora sí a descansar, en tanto, mientras me inviten a trabajar seguiremos sirviendo, es una gran satisfacción».

En el marco del día del maestro, presentamos «Maestro, desde su formación, hasta su jubilación y algo más», entrevista al maestro jubilado, Héctor Ceballos Hipólito

Inició su carrera como maestro rural en el año de 1982 y se jubiló en el 2015, luego de casi 34 años de servicio. Fue maestro de grupo y después director de la escuela primaria general «Andrés Figueroa» dónde se jubiló.

Ocupó el cargo de subdirector de la UPN de esta ciudad que le dejara satisfacción porque «no cuesta mucho ser responsable, ser honesto, ser servidor, cualidades que debemos de tener todos quienes trabajamos en algún puesto.»

Con visible emoción comentó: «Me jubile porque ya tenía la edad para hacerlo y ya quería descansar, pero me convencieron que aún tenía mucho que hacer.  Descansé y viajé unos meses para luego ocupar el cargo de director de cultura municipal y después como coordinador de la feria de la bandera. Esto entre los años 2016 y 2018.»

Sin embargo, el descanso no llego porque fue invitado por un empresario para ocupar el cargo de director de una escuela primaria privada del cual se retiró dos años después por problemas de salud, sin embargo, de una matrícula de 35 alumnos con la que inició, la entrego con 350 alumnos.

Tras su recuperación, fue invitado por el gobierno del estado que encabeza la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, para ocupar el cargo de director del museo de la bandera que actualmente ocupa.

De familia numerosa y de escasos recursos, con el apoyo de su madre pudo estudiar para ser maestro en el CREN al terminar su secundaria como era en ese entonces. «Ya como maestro rural conocí las necesidades de la gente por tener una escuela, un maestro que lo es todo.»

Platicó con orgullo que largos caminos recorrió durante varios años en comunidades de Teloloapan y que las necesidades de las comunidades como la de improvisar materiales para sumarlos a lo que llevaba, «me forjaron como maestro y me dieron salud a mi cuerpo porque además de caminar practique mucho deporte.»

El maestro jubilado, Ceballos Hipólito, reconoció que la diferencia entre los niños de las comunidades con los de la ciudad, es que en las comunidades hay mucho respeto y atención a los maestros, en tanto y que en la ciudad hay niños que no le hacen caso ni a sus papás y que en esto mucho tienen que ver las redes sociales; sin embargo, los maestros pugnan por los valores.

¿Qué me dejó la jubilación?, se cuestionó, «como maestro jubilado te dan tu pensión, que es un reconocimiento a los años de servicio, aunque es poca ayuda. En lo social hicimos muchos amigos que voy saludando cuando salimos a la calle y me da mucho gusto, el mismo gusto que cuando me saluda un ex alumno algunos ya grandes profesionistas

FUENTE: SATÉLITE INFORMATIVO IGUALA

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